Puestos a compartir, que sean sonrisas.

sábado, 9 de marzo de 2013

Veneno

Por supuesto que tengo veneno que extraer de mis entrañas.
Pero no quiero que seas tú el sumidero de todo este arsénico.

Cianuro biológico como resultado, diluido en agua y sal.

El truco está en diluirlo en una mezcla de sonrisas y lágrimas a partes iguales

1 comentario:

  1. Este blog es como ese intrigante libro que ansías leer cada noche antes de dormir. Su lectura es un placer para los sentidos y un alivio para el corazón. Un refugio para el alma. Seguro que no soy el único que lo piensa.
    Que sepas que para escribir lo que escribes hacen falta dos ingredientes: valor para decir lo que sientes (no ante los lectores, sino ante ti misma)y capacidad para decir lo que sientes de la manera más hermosa y enigmática posible. Aunque a veces es demasiado enigmática la forma en que escribes, por no decir, casi incomprensible, pero bien es cierto, amiga mía, que hay sentimientos totalmente incomprensibles.
    En resumen: no tengo más que elogios para tus escritos, que confío ver algún día publicados en un bonito libro de tapa dura y hermosa tonalidad.
    Un abrazo.

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